Los orígenes de la cultura de la Costa Noroeste

Contribuciones

Contemplando las distintas contribuciones, se puede ver que todas ellas comparten un materialismo básico y eso es todo lo que se necesita para explicar este desarrollo largo, relativamente lento y sinuoso. Esta evolución no puede comprenderse sin esos procesos materiales. Entre las perspectivas materialistas, ninguna es más importante ni ha cambiado tanto como la demografía. Cuando comencé como estudiante en 1962, el tema dominante para CR era que su vida era peligrosa, ruda y corta. Incluso leyendo a personas tales como Julian Steward (1955) —lo cual no creo haber hecho como estudiante— uno quedaba sorprendido por cierta rudeza de la vida y cómo ésta dependía de la generosidad de una naturaleza voluble, siempre bajo la amenaza potencial del hambre. En aquel momento, Richard Lee (1965) estaba haciendo su trabajo de campo para la tesis doctoral en Sudáfrica utilizando su análisis input/output para demostrar los relativamente bajos niveles de trabajo necesarios para obtener las calorías que uno necesitaba diariamente. En Man the Hunter (Lee y Devore, 1968) un cierto número de investigadores insistieron sobre este tema y aportaron resultados similares, dando lugar a la famosa declaración de Sahlins, llamando a la forma de vida de los CR la «sociedad opulenta original» (Sahlins, 1968a: 85). Aunque no todos estaban convencidos de que el modo de vida de los CR fuese tan edénico (Steward, 1968: 325), este modelo se convirtió rápidamente en un lugar común. Con la contribución de Suttles al volumen Man the Hunter, Coping with abundance: Subsistence on the Northwest Coast (Suttles, 1968), la Costa Noroeste fue un miembro fundador de estas sociedades.

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