Conclusiones (Mundos perdidos: V)

«I stood on the beach for a long time, waiting for the last bits of sunlight to vanish. Behind me, the town went about its business making familiar late-century American noises. As I looked down, the curve of the coast, I saw the lights of the houses being turned on, one by one. Then the moon came up from behind the hills. It was a full moon, as round and yellow as a burning stone. I kept my eyes on it as it rose into the night sky, not turning away until it had found its place in the darkness (298).» Al final de la novela Marco vuelve a estar solo, tan solo como tras la muerte del tío Victor, aunque esta vez el azar no le ha conducido a Central Park, sino a un territorio más salvaje: el desierto de Utah primero y las costas del Pacífico después. Sin padre, sin hijo, sin novia, sin ninguna clase de vínculo ni propiedad (le han robado el coche y todo el dinero del que disponía), en un territorio alejado de su ciudad natal, desposeído y expulsado como un personaje de...

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