Capítulo 2. Espacio-tiempo

30/12/2016 7.024 Palabras

Luz absolutamente especial Hay algo muy extraño en el comportamiento de la luz. Resulta que siempre se mueve a la misma velocidad con respecto al observador, independientemente del estado de movimiento relativo entre el emisor y el receptor. Esto es chocante, pues estamos acostumbrados a la idea de que las velocidades son siempre relativas. Cuando adelantamos un coche en la autopista, lo vemos con una velocidad relativa pequeña, aunque sabemos que se mueve muy rápido con respecto a un observador parado en la cuneta. Es precisamente esta intuición tan básica (que las velocidades relativas se suman) la que es contradicha de manera radical por el comportamiento de la luz.

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